Enseña a tu hijo a comer sano para evitar el déficit de Hierro y DHA
3 de 4 niños españoles de entre 1 y 10 años no alcanzan las ingestas de Omega 3 DHA recomendadas
- La importancia de enseñar a tu hijo a comer sano
- ¿Mi hijo tiene déficit de Hierro y DHA? Usa esta calculadora
- La leche adaptada ayuda a reducir el déficit nutritivo
Criar niños sanos es mucho más que llenar sus platos de comida; también es enseñarles a conocer qué necesita su cuerpo y su mente para crecer fuertes. En la infancia, se establecen todos esos hábitos saludables que, con un poco de suerte y tesón, los niños mantendrán en su edad adulta. Por ello, debemos enseñarles desde que son muy pequeños la importancia de comer sano para que no desarrollen carencias habituales en la actualidad como el déficit de Hierro y DHA.
Una alimentación completa y variada es suficiente para ayudar al correcto crecimiento y estado de salud de los niños. Pero, ¿cómo podemos asegurarnos de que nuestros peques tienen sus necesidades nutricionales cubiertas? Sigue leyendo y lo descubrirás, pero aquí tienes un pequeño adelanto: el Instituto Puleva de Nutrición ha desarrollado una sencilla calculadora nutricional que te será de gran ayuda para saber si tu hijo o hija tiene una ingesta suficiente de hierro y DHA.
La importancia de enseñar a tu hijo a comer sano
A través de la alimentación, los padres debemos asegurarnos de que nuestros hijos tienen cubiertas las necesidades nutricionales específicas durante esta etapa tan importante del desarrollo. Y es que, aunque a partir de los 12 meses los peques van incorporando nuevos grupos de alimentos, no nos podemos olvidar que aún no son adultos y, por tanto, su alimentación debe ser variada y rica en nutrientes concretos para potenciar el crecimiento.
Sin embargo, debido al estilo de vida actual (en el que tenemos menos tiempo para comprar y cocinar) y a los gustos alimentarios de los peques, nos estamos dejando por el camino algunos nutrientes esenciales para el desarrollo infantil como el Omega 3 DHA, el Hierro, el Calcio o la Vitamina D. No podemos pasar por alto que:
- El Omega 3 DHA ayuda al desarrollo intelectual de los más pequeños
- El Hierro es de gran importancia para la evolución cognitiva.
- El Calcio, como ya sabes, es muy importante para el crecimiento de los huesos.
- La Vitamina D ayuda a la absorción del Calcio y, además, fortalece el sistema inmunitario de los niños.
¿Mi hijo tiene déficit de Hierro y DHA? Usa esta calculadora
Según el Estudio EsNuPI (Estudio Nutricional en Población Infantil Española), la mayor investigación holística sobre nutrición infantil en España, podemos destacar que 3 de cada 4 niños españoles de entre 1 y 10 años no alcanzan las ingestas de Omega 3 DHA recomendadas por los organismos internacionales y, en particular, por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés).
Conociendo las conclusiones de esta investigación, es muy probable que te estés preguntando si tu hijo o tu hija están dentro de estas estadísticas. Para chequear si tu peque está tomando en su dieta habitual el hierro y DHA recomendado, el Instituto Puleva de Nutrición ha desarrollado una sencilla calculadora que está disponible en Puleva Peques Club. Puedes tocar o pinchar en la imagen para usarla.
La leche adaptada ayuda a reducir el déficit nutritivo
La clave para evitar que la dieta de tu hijo o hija tenga déficits nutricionales es ofrecer una alimentación variada y enseñar al propio niño a comer sano. En este sentido, podemos incorporar alimentos nutritivos que nos ayuden a complementar la dieta de una forma más sencilla.
En lo que se refiere al Hierro y DHA, la leche adaptada ayuda a reducir el déficit nutritivo. Y es tan fácil como cambiar el vaso de leche de vaca del desayuno por un vaso de leche de crecimiento (en niños de 1 a 3 años) o de crecimiento y desarrollo (en niños mayores de 3 años). Este gesto tan sencillo ayuda a incorporar algunos nutrientes clave que los niños no están consiguiendo obtener en cantidad suficiente a través de la leche de vaca ni a través de otros alimentos de su dieta.
Estos tipos de leches adaptadas están pensadas para satisfacer las necesidades nutricionales de los peques maximizando los beneficios para la salud y el desarrollo del niño Y, además, a pesar de no tener azúcares añadidos ¡están riquísimas!
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