Dolor de espalda durante el embarazo - Soluciones prácticas para la lumbalgia

Tres de cada cuatro mujeres sufrirán algún grado y tipo de dolor de espalda durante el embarazo. Este dolor puede variar de moderado a agudo y  aparecerá entre el 5º y el 7º mes de embarazo, pero también podría sorprender apareciendo desde la 8ª semana de gestación. No obstante, esto suele ocurrir cuando son mujeres que ya padecían dolores de espalda antes de quedarse embarazadas.

Sin embargo, aunque se trate de una dolencia muy común, no hay que tomarla a la ligera como si fuera un proceso normal propio del embarazo. Para una embarazada, el dolor de espalda puede tener un impacto muy negativo en su forma de vida y en sus actividades del día a día. En este sentido, la reflexología se convierte en una terapia indiscutiblemente necesaria en este período, bien como terapia preventiva, previniendo los futuros dolores de espalda, o como terapia puntual ayudando a la gestante a aliviar dicho dolor.

Tipos de dolor de espalda que aparecerán en el embarazo

- El dolor lumbar
Se localiza a la altura de la cintura hacia el centro de la espalda. A veces puede extenderse hacia la pierna o el pie. El dolor, por lo general, aumenta o empeora cuando se mantienen posturas corporales por un período largo de tiempo (estar sentadas o de pie) y cuando se ejecutan movimientos reiterados (ponerse de pie repetidamente).

- El dolor pélvico posterior
Se presenta en la parte de atrás de la pelvis, este dolor es cuatro veces más común en el embarazo que el dolor lumbar. Se trata de un dolor profundo que se presenta a la altura de la cintura, por debajo o a lo largo del sacro. Puede presentarse en uno o en ambos lados del cuerpo y a veces puede extenderse el dolor hacia los glúteos y muslos, sin llegar normalmente a la rodilla. Desafortunadamente, este dolor no desaparece tras el descanso, pero con la reflexología, sí podrás mejorar.

¿Y cómo es el dolor de espalda durante el parto? Este dolor es diferente al dolor de espalda durante el embarazo, se trata de un dolor muy similar a un calambre menstrual intenso, tratándose de un dolor persistente que incrementa su intensidad y frecuencia en un período corto de tiempo

Sean como sean los dolores, todos ellos son como consecuencia del aumento de peso durante la gestación, ya que esto provoca presión en la espalda, cambia el centro de gravedad del cuerpo, se producen desequilibrios musculares, los músculos se fatigan más rápidamente de lo normal produciendo posturas deficientes y la producción hormonal de relaxina y estrógeno pueden causar problemas, debido a que generan laxitud en las articulaciones, especialmente en la pelvis.

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Cómo prevenir y aliviar el dolor de espalda en el embarazo con reflexología

Mucha gente prefiere esperar antes de realizar cambios para prevenir un desequilibrio. Sólo actúan en consecuencia cuando aparece la enfermedad o síntomas de una condición determinada, decidiendo exclusivamente en ese momento recibir tratamiento de reflexología. Una embarazada tiene limitaciones en la administración de fármacos en el embarazo y esta terapia natural es una solución excelente para aliviar los dolores de espalda. Como reflexóloga especializada en la maternidad, aconsejo unir a tu embarazo un programa específico de reflexología para embarazadas, esto te ahorrará muchas molestias que inevitablemente genera el embarazo.

El dolor de espalda ha de tratarse para garantizar una mejor calidad de vida de la embarazada en este período, para facilitar un parto sin complicaciones y para evitar los posibles dolores de espalda que podrían perdurar tras el embarazo. Por eso te aconsejo que busques un reflexólogo experimentado y especializado en maternidad para empezar a disfrutar sin dolores de la futura llegada de tu bebé.

¿Embarazada y con dolor de espalda? Otros métodos para calmar las molestias

Aquí tienes algunos consejos y técnicas para aliviar el dolor de espalda durante esta etapa tan especial:

1. Mantén una buena postura
- Consejo: A medida que tu barriga crece, es fácil caer en una mala postura. Mantén los hombros hacia atrás y el cuello recto. Evita arquear la espalda.
- Técnica: Practica el equilibrio distribuyendo el peso de manera uniforme en ambos pies y evita estar de pie por largos periodos.

2. Usa calzado adecuado
- Consejo: Elige zapatos cómodos y de soporte adecuado, evitando tacones altos.
- Técnica: Opta por zapatos con un buen soporte para el arco y evita estar descalza por periodos prolongados.

3. Ejercicio regular
- Consejo: El ejercicio moderado puede ayudar a fortalecer los músculos de la espalda y mejorar la postura.
- Técnica: Realiza ejercicios seguros para el embarazo, como caminatas, natación y yoga prenatal.

4. Apoyo lumbar
- Consejo: Usa cojines o almohadas para proporcionar soporte adicional a tu espalda baja.
- Técnica: Coloca una almohada detrás de tu espalda al sentarte y utiliza una almohada para el embarazo al dormir para mantener una postura cómoda.

5. Masajes prenatales
- Consejo: Un masaje prenatal puede aliviar la tensión en los músculos de la espalda.
- Técnica: Acude a un masajista especializado en masajes prenatales que conozca las técnicas adecuadas para mujeres embarazadas.

6. Compresas calientes o frías
- Consejo: Aplicar calor o frío puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación.
- Técnica: Usa una compresa caliente o una bolsa de hielo en la zona afectada por 15-20 minutos varias veces al día.

7. Hidratación y nutrición
- Consejo: Mantenerse bien hidratada y seguir una dieta equilibrada puede ayudar a mantener los músculos y ligamentos fuertes.
- Técnica: Bebe suficiente agua y asegúrate de consumir alimentos ricos en calcio y magnesio.

8. Evita levantar objetos pesados
- Consejo: Levantar objetos pesados puede aumentar el riesgo de dolor de espalda.
- Técnica: Si necesitas levantar algo, hazlo doblando las rodillas y no la espalda, y mantén el objeto cerca de tu cuerpo.

9. Consulta con tu médico
- Consejo: Siempre es importante hablar con tu médico sobre cualquier dolor o malestar durante el embarazo.
- Técnica: Tu médico puede recomendarte ejercicios específicos, fisioterapia o tratamientos adicionales si es necesario.

El dolor de espalda durante el embarazo puede ser incómodo, pero con las estrategias adecuadas, puedes encontrar alivio y disfrutar de este tiempo especial. Mantén una buena postura, realiza ejercicio moderado y utiliza técnicas de apoyo adecuadas para tu cuerpo. ¡Y no dudes en recurrir a la reflexología! Si el dolor persiste, no dudes en consultar a tu médico para obtener asesoramiento adicional. ¡Cuida de ti misma y disfruta de tu embarazo!

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