NO al abuso sexual infantil

El abuso infantil es una de las grandes preocupaciones de los padres en este inicio de siglo. Y no es para menos. Todos los días se conocen más y más casos de abuso sexual a niños y niñas. Abusos por parte de los padres, familiares, conocidos, vecinos, educadores, cuidadores, psicólogos, curas, e incluso de integrantes humanitarios, no nos anima, en nada, a fiarnos de los demás.

Los casos se incrementan aunque existan iniciativas respetables que trabajan por la prevención y en la solución de este gran problema. Profesionales, padres, abuelos, y víctimas de abuso sexual argentinos, están se unieron en una web para informar, esclarecer, orientar y luchar contra el abuso sexual infantil. Ellos advierten a los padres, educadores, etc., que los niños no mienten, no fabulan, no fantasean cuando cuentan que han sido abusados.

La lucha contra el abuso infantil

La ONG británica Save the Children ha denunciado en numerosas ocasiones que niños y adolescentes en Costa de Marfil, sur de Sudán y Haití, son víctimas de abusos sexuales por parte de integrantes de fuerzas de paz y trabajadores de entidades humanitarias. Los someten a violaciones, prostitución y esclavitud sexual, sin que puedan defenderse.

Pero los abusos no tienen nacionalidad. Y el gran problema no es sólo el abuso en si, como también la falta de apoyo a estos niños, víctimas calladas, inmersos en una culpabilidad y vergüenza, sin sentido. A través de Abuso sexual infantil NO, se puede denunciar casos de abusos, y al mismo tiempo informarse sobre cómo prevenirlos, y cómo educar a los niños para que se protejan de esta traumática situación. Se habla sin tapujos sobre el abuso sexual infantil para que deje de ser un tema tabú en la sociedad, para que todos estén preparados para detectar algún caso y denunciarlo inmediatamente, y así proteger a los niños.

A los niños no se les pega, no se les amenaza y no se les humilla. Los adultos no salimos por ahí pegando ni maltratando a los demás. ¿Por qué muchos creen en el derecho de hacerlo a su hijo? El abuso destroza lazos entre padres e hijos. Causa daños terribles en los niños, daña a su autoestima y a su aprendizaje, fomenta la rabia y la impotencia, y destruye la confianza en sí mismos y su amor propio. Los cuerpos de los niños no están y no deben ser sometidos a la voluntad de los adultos. Sus cuerpos son suyos y de nadie más.

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