¿Es fácil concebir un hijo?
¿Es fácil concebir un hijo?
- Las dificultades para concebir un hijo
Hay un dicho que dice: 'la naturaleza es sabia', algo muy cierto, ya que nuestro cuerpo nos da señales, avisos y advertencia sobre nuevas situaciones. La naturaleza nos prepara durante el embarazo con cambios corporales y emocionales que nos prepararán para una futura maternidad. Pero ¿siempre la naturaleza tiene sus caminos para lograr nuestros objetivos reproductivos?
¡A veces, a la naturaleza no hay quien la entienda! Seguramente hay un por qué para casi todas las situaciones, pero cómo se puede explicar que una pareja que ha concebido sin problemas a su primer hijo, luego no consiga hacerlo con el segundo, o cómo es posible que dos hermanos se distancien 10 o más años sin que sus padres hayan hecho nada para evitar un embarazo (¡10 años de periodo infértil!). Pues estas situaciones son más frecuentes de lo que creemos.
Las dificultades para concebir un hijo
¿Es fácil concebir un hijo? Seguramente, no. Y no me refiero al problema para concebir por esterilidad, problemas orgánicos, pasar de los treinta o por tener hábitos poco saludables. Para algunas parejas es sumamente fácil y para otras no tanto, aunque en ambos casos se den las mismas condiciones físicas.
Tengo unos amigos que se hicieron un estudio de fertilidad porque los hijos no llegaban y ellos lo deseaban enormemente. Les hicieron un estudio completo a ambos y el resultado fue que los dos tenían un perfecto funcionamiento de su aparato reproductor, edad idónea, buena condición física, buenos hábitos de alimentación y relaciones frecuentes. Esta pareja lo tenía todo para poder llegar a concebir con éxito y, sin embargo, la llegada de su primer hijo no llegó hasta cuatro años después de intentarlo.
Curiosamente, su segundo y tercer hijo, vinieron al primer intento ¿qué pasó entonces? Existen multitud de factores por los que las parejas pueden tener ciclos de infertilidad (incluso con duración de años), que a veces pueden estar provocados por una situación de nerviosismo, estrés o ansiedad, pero en otros no tienen una explicación clara ni aparente. Muchas veces, cuando nos relajamos o cuando tiramos la toalla, es cuando se realiza el milagro. La naturaleza tiene la respuesta, pero nosotros no siempre llegamos a entender la causa de estos espacios en blanco en nuestra capacidad reproductiva. Concebir en muchos casos es un complejo sistema de sincronía orgánica entre el hombre y la mujer, fácilmente alterable. Las características de los espermatozoides, la viabilidad del óvulo, la fecundación por parte del espermatozoide del óvulo, la implantación en el útero, los aspectos hormonales, emocionales..., son muchos los factores que intervienen a la hora de procrear.
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