El poder de las nueces para quedarte embarazada

Cuando empezamos a planificar quedarnos embarazadas, pueden surgir muchos nuevos hábitos y cambios en nuestra vida, pero sin duda uno de los más eficaces es el incorporar a nuestra alimentación alimentos que nos sean útiles para este propósito. Existen muchos tipos de dietas y alimentos, pero las nueces son una de nuestras más antiguas aliadas, siendo parte de numerosos platos concebidos para la fertilidad en civilizaciones antiguas como Persia o Egipto, además de contar con gran referencia científica. Descubre el papel y el poder de las nueces para quedarte embarazada.

Los beneficios de las nueces para la alimentación de la mujer

Primero de todo, las nueces forman parte de los frutos secos, y como fruto seco (que no fruta seca, como serían los dátiles) tienen en común una gran cantidad de energía, es decir calorías, principalmente en forma de grasas. Para que nos hagamos a la idea, el 60 % de la nuez serían grasas. Ojo, que no todas las nueces son iguales, algunas de las más conocidas y apreciadas serían la pecana, macadamia, y la que normalmente comemos es la variedad Junglans, de la que las más valoradas son la nuez de Castilla y la de California.

En general, las nueces tienen un gran contenido en grasas, pero no todas las grasas son iguales. Tenemos que pensar que nuestro organismo tiene un gran contenido en agua, y para separar esa agua por zonas necesitamos una barrera. Esa barrera son las grasas, que forman la capa lipídica de todas las células de nuestro cuerpo. Así que imaginad cómo de importante es el tipo de grasas que consumimos.

Por ello, nuestro organismo es capaz de sintetizar una buena parte de tipos de grasas para poder utilizarlo en diferentes procesos orgánicos, pero hay otros tipos de grasas que las tenemos que ingerir para poderlas incorporar: AGE (ácidos grasos esenciales), como el conocidísimo Omega 3 y los Omega 6.

Y aquí las nueces ganan por goleada, ya que el 68% de los lípidos de la nuez pertenece a ácidos grasos poliinsaturados (AGP), de los cuáles obtendríamos el Omega 3. Y de las variedades anteriores, tanto la de California como la de Castilla tendrían el valor más elevado en Omega 3. En cambio, la pecana y macadamia tienen más omega 9, que es el mayoritario del aceite de oliva, muy equilibrado en nutrientes, pero nuestro cuerpo es capaz de sintetizarlo, y no sería una fuente tan abundante de omega 3.

Cómo pueden las nueces mejorar nuestra fertilidad

Debemos fijarnos en dos de sus componentes activos, es decir, que tienen un papel sobre las funciones orgánicas de nuestro cuerpo. Los componentes que ayudarán son los omega 3 y el selenio.

- Los omega 3 son fundamentales en el proceso antiinflamatorio de nuestras membranas y nuestro sistema reproductor no deja de tener membranas y mucosas también. Por lo que si sufres de SOP (Síndrome de Ovario Poliquístico) o endometriosis (inflamación de tejidos endometriales fuera de la cavidad uterina) está claro que tienes que incluirlas en tu menú alimentos con omega 3.

- El selenio, por otra parte, mejora la función tiroidea, aumentado así las posibilidades de embarazo. Pero no solo para las mujeres, ya que la calidad del esperma también se ve beneficiada por el contenido en omega 3 y selenio de las nueces.

Cómo incluir este fruto seco en la dieta de la embarazada

Para incluirlas en nuestra dieta, primero de todo es importante saber la cantidad diaria, ya que, aunque son muy buenas para la salud, tampoco conviene excedernos. Así la cantidad de nueces por ración serían unos 25 gramos, que corresponden a unas 5 unidades. De esta manea se cumple con 32% CDO (Cantidad Diaria Orientativa) de omega 3 en mujeres (unos 500 mg día).

Por último, hay que tener en cuenta que como grasas no son siempre fáciles de digerir solas, por lo que las vamos a mezclar preferiblemente en las comidas del mediodía, por ejemplo, en una ensalada o también las puedes echar en el yogurt de postre.

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