- Programado Alejandra Rubio ingresa en el hospital para dar a luz a su primer hijo
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Alejandra Rubio y Carlo Costanzia ya son padres. Este pasado jueves 5 de diciembre nacía en Madrid Carlo, su primer hijo, fruto de su inesperada historia de amor y nexo de unión entre dos conocidísimos rostros del papel cuché de nuestro país: Mar Flores y Terelu Campos. Abuelas paterna y materna, respectivamente, que nunca han sido amigas y que se han posicionado en bandos contrarios en alguna que otra polémica de la crónica social y que ahora se han convertido en familia.
En las primeras horas de vida del pequeño, ambas se dejaron ver por la Fundación Jiménez Díaz, igual que Alejandro Rubio y Carlo Costanzia, abuelos del bebé.
Peluches, sonrisas y bolsas de supermercados gourmet entraban y salían por las puertas del centro médico del que, a media tarde del sábado, salía la tímida pareja de manera inesperada. Alejandra y Carlo posaban para la prensa cuando aún estaba Alejandra ingresada. Allí mismo, ante las cámaras, los recién estrenados papás confirmaron que el parto había sido largo y que finalmente había terminado en cesárea, y mostraban su agradecimiento a la prensa por la atención y el trato que estaban dando a la feliz noticia.
La sorpresa llegó el domingo cuando, mientras aún se les esperaba en el hospital, se pudo ver a Terelu entrando y saliendo de casa de su hija, donde la familia ya se había instalado sin que nadie les hubiera visto salir del centro médico.
En un primer encuentro con los periodistas en la puerta de casa de su hija y su yerno, la feliz abuela aseguró que ahora les tocaba descansar y aseguró que estaban siendo unos días muy especiales. La visita fue breve y horas más tarde, Terelu volvió. Pero al volver a ver a la prensa la hija de María Teresa Campos no pudo disimular su disgusto y se mostró molesta ante tantísima expectación.
La presentadora aseguró que si bien a ella no le importaba que le tomasen fotos en ese momento, esperaba que se respetase más este momento de la vida de su hija y pedía que se le permitiera disfrutar de los primeros paseos con su bebé sin el revuelo que supone tener a la prensa detrás.