¿Cuándo se recomienda congelar óvulos? - Vitrificación ovocitaria
Si estás pensando en retrasar tu maternidad la congelación de óvulos puede ser tu opción
- ¿Cuándo se debe pensar en la vitrificación de óvulos?
- Edad ideal y factores que determinan realizar la congelación de óvulos
- Ventajas y desventajas del embarazo logrado luego de la vitrificación
La maternidad es una experiencia maravillosa que la mayoría de las mujeres no nos queremos perder, pero si aún no la estás planeando ¿cuándo se recomienda congelar óvulos? ¿O pensar en la vitrificación ovocitaria? Sabemos que ciertos aspectos de nuestra generación que nos empujan a aplazar la maternidad: encontrar un buen trabajo, tener estabilidad económica, encontrar pareja estable, viajar, estudiar, etc. Afortunadamente, hoy en día existen tratamientos como este con el que podemos preservar nuestros óvulos y, por ende, cumplir nuestro sueño en una etapa más tardía de nuestra vida.
¿Cuándo se debe pensar en la vitrificación de óvulos?
El proceso de vitrificación de óvulos es el único efectivo fuera de la fase experimental mediante el cual los óvulos son extraídos de la paciente y congelados especialmente para que se conserven a lo largo de los años. Es decir, es el único proceso con algunas garantías mediante el cual las mujeres pueden congelar sus óvulos hasta que decidan ser madres. Con este tratamiento, pues, se evita tener que recurrir a donantes y alargar el proceso hasta la ansiada maternidad.
Para llevar a cabo la vitrificación de óvulos, la mujer deberá pasar por un tratamiento y, posteriormente, por la extracción de los óvulos. Finalmente, estos serán congelados siguiendo una técnica específica y almacenados hasta que la paciente decida usarlos. Es importante mencionar que aunque se haya llevado a cabo este procedimiento, la mujer no está obligada a utilizar los óvulos congelados, por lo que puede renunciar al embarazo sin ningún tipo de problema ni complicación.
La vitrificación ovocitaria se recomienda hasta pasados los 30 años, es decir, no es necesario ni recomendable que una mujer en sus veintes se realice el proceso debido a todo el desgaste emocional y físico que conlleva, aunque se deben tomar en cuenta otros factores que quizá comprometan su fertilidad, tal vez si se habla de cáncer o de algo que implique una histerectomía radical.
La edad es el principal factor para realizar este proceso, ya que en la actualidad hay más mujeres que retrasan ser madres por sus proyectos de vida y carrera, pero que aún no renuncian del todo a la maternidad. También es una decisión que no debe tomarse a la ligera, porque este proceso implica todo un desgaste tanto económico como psicológico al que la mujer debe prepararse.
Edad ideal y factores que determinan realizar la congelación de óvulos
Pese a ser un proceso muy efectivo y ampliamente empleado, no es aconsejable para todas las mujeres. Como ya hemos dicho antes y teniendo en cuenta su coste y su efectividad, cada paciente deberá valorar esta posibilidad de acuerdo con sus necesidades y contando, siempre, con la ayuda y opinión de un profesional en reproducción asistida, quien la orientará desde el inicio del proceso.
En primer lugar, este proceso no se aconseja a mujeres de 25 a 30 años, ya que se entiende que existe mucho margen de tiempo en el que pueden ser madres sin necesidad de recurrir a este tratamiento. En este sentido, pues, la vitrificación solo se aconseja a partir de los 31 a los 35 años en aquellas mujeres que hayan decidido ser madres en una etapa posterior. De este modo, los óvulos congelados siguen manteniendo su calidad hasta el momento de la implantación.
Sin embargo, el hecho de recurrir a este tratamiento no es garantía de que el embarazo, finalmente, vaya a producirse; por ello, se sigue recomendando a las mujeres que planifiquen la maternidad dentro de los años más fértiles de su vida. Teniendo en cuenta los aspectos generacionales y el papel, cada vez más importante, de la mujer en la sociedad, la maternidad puede alargarse hasta los 35 años aproximadamente.
Más allá de esta edad, los óvulos empiezan a perder calidad y es cuando se pueden dar problemas a la hora de conseguir la fecundación. Así, la vitrificación de óvulos es un proceso que puede llevarse a cabo, como hemos mencionado, entre los 31 y los 35 años para aquellas mujeres que quieran ser madres a partir de los 35 años y hasta los 41 aproximadamente.
Ventajas y desventajas del embarazo logrado luego de la vitrificación
El tratamiento de vitrificación de óvulos no conlleva peligro en sí. Sin embargo, al ser embarazos tardíos, las mujeres sí deben tener en cuenta que puede haber complicación tanto en el embarazo como en el parto. Estas complicaciones, las mismas que en los embarazos naturales, incluyen:
- Diabetes gestacional.
- Parto prematuro.
- Preeclampsia y eclampsia.
- Hipertensión arterial.
- Necesidad de recurrir a una cesárea.
Sin embargo, lo que sí se puede evitar con este tratamiento son algunos problemas congénitos, ya que el óvulo fecundado mantendría la calidad de su material genético. Así, problemas como el Síndrome de Down, cuyas tasas de incidencia aumentan a partir de los 35 años, si bien no quedarían eliminadas del todo, sí estarían minimizadas a un riesgo inferior.
En la actualidad, la vitrificación de óvulos es el único proceso recomendado fuera de la fase experimental que las mujeres tienen a su disposición si deciden posponer la maternidad más allá de los 35 años. Es un tratamiento que no se aconseja a todas las mujeres por distintos motivos y que, en ningún caso, asegura que el embarazo vaya a producirse. Sin embargo, es una buena alternativa cuando no se quiere recurrir a óvulos de donantes.
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Bibliografía
- Schwarze, J.E., Balmaceda, J., et al. (2012) Vitrificación ovocitaria para posponer fecundidad: experiencia de la Unidad de Medicina Reproductiva de Clínica Monteblanco. Revista Chilena de Obstetricia y Ginecología, vol. 77, núm 4. Sociedad Chilena de Obstetricia y Ginecología (ed.) Chile, pp. 286-290 Disponible en: https://www.scielo.cl/pdf/rchog/v77n4/art08.pdf