Francisca y la Muerte - Versión libre del cuento corto para niños

Te traemos Francisca y la Muerte, versión libre del cuento corto para niños, con la que pasarás una tarde maravillosa con tus hijos. Es una versión diferente a la original del escritor cubano Onelio Jorge Cardoso, pero que les fascinará por su temática. Es un cuento perfecto para la época de Día de Muertos y para comprender mejor a la muerte.

Cuento corto para niños - Versión libre de Francisca y la Muerte

'Buenos días', dijo la Muerte, quien llegó a una pequeña casa de adobe al final de la calle. 'Quisiera saber dónde vive la pequeña Francisca'.

- Ella vive con sus papás y su hermano al otro lado del pueblo, le dijo una señora de mediana edad.

Andando, la Muerte vio que eran las 10 de la mañana. 'Tengo que llevarme a Francisca a las 3 de la tarde, hay tiempo de ir a buscarla'. Llegó a una casa con un patio enorme y preguntó de nuevo por la niña:

- Ella no está aquí, se cansó de jugar y se fue con su mamá al mercado.

- ¿Y a qué hora regresa?- preguntó.

- ¡Nadie lo sabe!, le contestaron, 'después se pone a hacer su tarea y otros quehaceres'.

- ¿Cree que tarde mucho en volver? ¿Puedo esperarla aquí?

- Sí, pero a veces ella se va a visitar a su abuela y regresa hasta el anochecer.

'¡Híjole!' -pensó la Muerte-, 'me tengo que ir a las cinco. Mejor voy a buscarla al mercado'. Pidió informes de cómo llegar y le dijeron que si se apuraba quizá la encontraba en casa de su tía que estaba de paso.

Llegó a medio camino y le dijeron que Francisca había pasado un rato en el parque comiendo helado, pero que ya iba de camino a casa de la abuela. Se le ocurrió mejor llegar allá.

- Buenas... ¿aquí estará la niña Francisca?, preguntó a la abuela que abrió confundida.

- No, no está aquí, de hecho, hoy no viene, sino hasta mañana.

La Muerte rabió y miró su reloj, 'ya son casi las 4 de la tarde, se me va a ir el tren'. Pero antes de partir preguntó a la abuela:

- ¿Podría decirme si es Francisca esta pequeña a la que busco?, dijo mientras sacaba una fotografía. En ella se veía una niña de cabellos rubios, mejillas sonrosadas y los ojos castaños más lindos.

- Sí, es ella... solo que aquí no se ve la hermosura de sus ojos. Esos ojos se ríen con cada guiño, con cada toque del sol y con cada maravilla que ve. Es la mirada más pura que he conocido y pertenece a la niña más inquieta, de quien tengo la dicha de ser abuela.

La Muerte se sintió un poco avergonzada. La abuela continuó.

- Mi niña siempre está buscando hacer el bien a los demás, va a la iglesia, reza sus oraciones, ayuda a los desposeídos, acompaña a su mamá al mercado, ayuda a cuidar a su hermanito y es amada por todos sus amigos. Ella hace de nuestro mundo el mejor.

La Muerte finalmente comprendió que sería una pena llevarse a una pequeña así de linda a la que no había encontrado en toda la mañana. La niña Francisca no había llegado mientras la estuvo esperando. Así que, frustrada, la Muerte echó a andar rumbo al tren rumiando algo que solo la abuela escuchó desde el zaguán.

No bien había cruzado la calle, llegaron Francisca y su madre a la casa de la abuela: se habían entretenido un poco en la iglesia, ya que se habían detenido a ayudar al sacerdote a acomodar los floreros del lugar. 

Al llegar, la abuela les contó que la Muerte había estado ahí, preguntando por Francisca, pero que al a contarle lo que hacía en el día y cómo iluminaba los días de los demás, se había marchado no sin antes decir para sí misma:

- Hoy no pude llevarme a Francisca, al paso que va ¿cuándo se va a morir? Creo que en muchos años más, cuando ya no tenga nada qué hacer.

Preguntas de comprensión lectora sobre el cuento corto

Te dejamos estas preguntas de comprensión lectora para entender mejor el cuento corto en este Día de Muertos:

1. ¿A qué hora planeaba la Muerte llevarse a Francisca?
2. ¿Qué actividad realizaba Francisca cuando la Muerte preguntó por ella?
3. ¿Por qué motivo a veces Francisca regresaba a su hogar hasta el anochecer?
4. ¿Qué estaba haciendo Francisca en el parque antes de ir a la casa de su abuela?
5. ¿Por qué la Muerte se sintió frustrada en la casa de la abuela?
6. ¿Qué característica física destacaba en la fotografía que mostró la Muerte de Francisca?
7. ¿Cómo describió la abuela los ojos de Francisca al ver la foto?
8. ¿Qué actividades cotidianas realizaba Francisca que hacían del mundo un lugar mejor?
9. ¿Cuál fue la razón por la que Francisca y su madre se retrasaron al llegar a la casa de la abuela?
10. ¿Qué pensó la Muerte al final sobre cuándo se llevaría a Francisca?
11. ¿Qué influencia tuvo la bondad y las acciones de Francisca en la decisión de la Muerte?

¿Cómo se puede hablar de la muerte con los niños?

Abordar el tema de la muerte con los niños puede parecer delicado y más si está cerca el Día de Muertos. Como adultos, preferimos proteger a los más pequeños esperando que sean mayores para entender ciertos temas. Es esencial que estemos preparados para manejar sus preguntas y preocupaciones:

• Sé directa pero sensible
  Los niños tienen una capacidad sorprendente para aceptar y comprender la realidad. Usar eufemismos como 'se fue a un lugar mejor' o 'está durmiendo' puede resultar confuso. Es preferible explicar que cuando alguien muere, su cuerpo deja de funcionar, y ya no volverá a estar con nosotros, claro que  usando el lenguaje al nivel de comprensión del niño. Aprovecha el Día de Muertos para tratar el tema.
• Fomenta la comunicación
  Haz que tu hijo sienta que puede hacer preguntas y expresar sus sentimientos sin temor a ser rechazado o juzgado. Estar disponible para hablar cuando tu pequeño lo necesita y animarlo a compartir sus pensamientos puede ayudarle a procesar la situación.
• Usa historias o libros
  Cuando las palabras no son suficientes o no encuentras la manera adecuada de explicar la muerte, los libros o cuentos diseñados específicamente para niños, son herramientas valiosas. Estas historias presentan el tema de una manera accesible y tierna. Busca algpun cuento infantil sobre el Día de Muertos,por ejemplo.
• Valida sus emociones
  Los niños deben saber que está bien sentirse triste, confundido, enojado o cualquier otra emoción que puedan experimentar. No deben sentirse presionados a superar la pérdida rápidamente. Es mejor ayudarles a encontrar maneras de expresar sus emociones, ya sea dibujando, escribiendo, o llorando

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